Pequeñas, reformadas y en el centro, así son las viviendas que los extranjeros demandan en Barcelona.
El comprador proveniente principalmente de Europa del Este y el sur de Europa.
Barcelona es una de las ciudades europeas que más interés despierta entre los extranjeros para comprar vivienda. El inversor que reside en la Ciudad Condal proviene principalmente de países del este y del sur de Europa, y busca residencias de tamaño reducido -de entre 50 y 70 metros cuadrados- que tengan una o dos habitaciones. En cuando a la ubicación, se decantan por el centro, especialmente por los distritos de Sagrada Familia, l’Eixample, Sant Antoni, Gràcia o Poble Nou.
Es el análisis elaborado por el Iñaki Unsain, personal shopper inmobiliario (PSI), que destaca que la demanda se ha desplazado hacia zonas céntricas de la ciudad, algo que antes no ocurría. «Los distritos más cotizados para estos ciudadanos son zonas como Sagrada Familia, l’Eixample o Gràcia, aunque también existe una alta demanda en el litoral: «muchos ciudadanos relacionan Barcelona con el ocio y la playa y buscan residencia en barrios cercanos al mar como Poble Nou», dice.
Lejos de buscar el alto standing, la preferencia actual en el residencial barcelonés sitúa entre las prioridades la comodidad, el confort y las oportunidades de ocio y cultura que ofrece el centro de la ciudad. «Para estos ciudadanos europeos, Barcelona es una ciudad rica culturalmente y de mucho ocio, relacionan la ciudad con Gaudí o la playa, por eso ya no existe tanto desplazamiento hacia las zonas altas de la ciudad o de montaña»
Según Idescat, tan solo la ciudad de Barcelona acoge el 22% del total de nuevos extranjeros residentes en Cataluña. Italia, Francia y Alemania son, junto a Colombia y Argentina, los países que han sufrido una mayor variación positiva respecto a años anteriores. «Siempre hay una constante de ciudadanos árabes o rusos de alto poder adquisitivo que busca residencia en zonas como Pedralbes, pero es un número muy reducido respecto al total», detalla Iñaki Unsain en relación al aumento de ciudadanos extranjeros residentes en Cataluña.
En total, el número de ciudadanos europeos residentes en Cataluña aumentó en 13.906 personas este último año, un crecimiento de un 3,6% en términos interanuales y elevando el total a una cifra inédita en la última década.
Lorena Torío/eleconomista.es