Los dueños de Idealista exploran la salida a bolsa del portal inmobiliario.
Aunque la intención sería saltar al parqué, abren la puerta a una venta directa y/o un ‘dual track’.
EQT Partners, Apax Partners y Oakley Capital, los tres fondos de capital privado dueños de Idealista, empiezan a sondear el mercado y a estudiar diversas alternativas estratégicas para la venta del portal inmobiliario líder de España y el sur de Europa. Según confirman diversas fuentes financieras, aunque la intención sería realizar una eventual salida a Bolsa si la situación de los mercados lo permite, también podrían abrir la puerta a una venta directa e incluso explorar ambas opciones en paralelo, planteando una transacción conocida en la jerga financiera como dual track.
Otras fuentes matizan que «no hay decisión tomada y el proceso es aún muy incipiente», pero el consorcio inversor liderado por la gestora de private equity sueca EQT, que controla mayoritariamente el grupo, ha entablado contactos preliminares con Jesús Encinar, fundador y CEO de Idealista. La compañía, en el foco del capital riesgo desde sus orígenes hace 23 años, ha atraído el apetito de los pesos pesados del private equity en España en sucesivas subastas altamente competitivas. Si la salida a bolsa llega a materializarse, Idealista emularía así a otros portales inmobiliarios cotizados como Rightmove, líder del mercado en Reino Unido.
Traspasos de fondos
Aunque en principio la transacción se plantearía como una desinversión, EQT, la gestora liderada por Asís Echániz (infraestructuras) y Carlos Santana (private equity) en España, dueña también de Parques Reunidos, Freepik y la fotovoltaica Solarpack, podría plantearse reinvertir para seguir presente en Idealista. Un movimiento que ya realizó Apax Partners en 2021 con su vuelta al portal inmobiliario mediante la recompra del 17% a EQT por 250 millones de euros. Entonces, la operación valoró el 100% de Idealista en 1.470 millones de euros. El private equity británico había vendido -a finales de 2020- sus acciones, representativas del 82,60% del capital, a la gestora nórdica valorando el marketplace en 1.321 millones de euros con jugosas plusvalías: un extraordinario retorno de 5 veces el capital invertido.
Los fondos de capital privado anticiparían su salida ante el cambio de ciclo y la posible desaceleración del mercado inmobiliario e hipotecario
Casi en paralelo a la reinversión de Apax, otro private equity británico, Oakley Capital, se hizo con el 12% de Idealista por 175 millones de euros. Desde entonces ambos fondos comparten capital con los accionistas mayoritarios de Idealista: el equipo directivo -liderado por los hermanos Encinar- y EQT, a través de su vehículo EQT Fund IX.
Fundada en el año 2000 en pleno boom de las puntocom por Andrés de la Morena, Jesús Encinar, César Oteiza y Bernardo Hernández, Idealista nació como una startup del sector de publicidad inmobiliaria para competir con los portales de la prensa y gigantes como Páginas Amarillas. Hoy es el claro líder en España y Portugal y, tras la adquisición de Casa.it a Oakley Capital, la mayor plataforma inmobiliaria de Italia, también lidera el país transalpino. En sus primeros seis años de vida, la compañía ya logró repartir dividendos.
En 2007, se fijó en Idealista Tiger Global, un conocido venture capital americano, especializado en el mundo de Internet. El fondo «sacó» a muchos pequeños inversores del capital e invitó a los fundadores a reinvertir. Desde entonces, la empresa ha seguido creciendo, mejorando su oferta y expandiéndose a países como Italia y Portugal. A Tiger le sustituyó Apax Partners y luego llegaron EQT Partners y Oakley Capital, los últimos inversores financieros de referencia en apostar por el portal. En 2021, Idealista disparó sus ingresos hasta 101,5 millones de euros, un 23% más que en 2020. Obtuvo un ebitda de 54 millones de euros, pero registró pérdidas contables de 59 millones por la amortización del fondo de comercio.
Apax ya tanteó el salto al parqué en 2020 pero vendió a EQT con un retorno de 5 veces
Los planes de salida a bolsa del portal de compra y alquiler de viviendas vienen de lejos: Apax Partners ya sondeó la operación en 2020. La gestora británica llegó a contratar a Morgan Stanley y Bank of America para sacar a cotizar la plataforma inmobiliaria gestionada por los hermanos Encinar, pero el estallido de la pandemia de Covid-19 paralizó en seco el mercado de ofertas públicas de venta (OPVs). Y aunque en 2021 las salidas a la bolsa española se reactivaron (con Línea Directa, Acciona Energía y Ecoener), en 2022 volvieron a frenarse de nuevo por la incertidumbre macroeconómica y la guerra de Ucrania. Las primeras estimaciones para el frustrado intento de salto al parqué valoraron Idealista en cerca de 1.000 millones de euros. Sin embargo, la venta directa a un inversor como EQT alcanzó una tasación superior (1.321 millones de euros) permitiendo al portal entrar en la lista de unicornios españoles y marcando un récord en el M&A nacional de empresas tecnológicas. Fondos como KKR o Blackstone también mostraron interés por la compañía. El alza de tipos de interés, un mercado bursátil volátil y los vaivenes en el sector bancario e inmobiliario destacan como principales desafíos actuales junto a fuertes caídas en las valoraciones.
Refinanciación y compras
En 2022, los dueños de Idealista refinanciaron la deuda de la compañía con un préstamo de 100 millones de euros, y vencimiento a 2028, suscrito, entre otras entidades, por Banco Santander, CaixaBank, ING, Crédit Agricole y Société Générale. Una operación que les permitió abonarse un nuevo dividendo.
Idealista ha afianzado también su crecimiento con una estrategia combinada que incluye la compra de empresas y el crecimiento inorgánico. En 2019, tomó el control de AvaiBook, un software que ofrece soluciones para los gestores de alquiler vacacional y rural. En 2020, entró en el accionariado del portal inmobiliario Yaencontre, propiedad del Grupo Godó, y tres años después, adquirió HCPro Software Imobiliário, con sede en Portugal, y las plataformas inmobiliarias del Instituto de Desarrollo Asegurador.
Rocío Casado/eleconomista.es
