El alquiler pierde fuerza: la subida del precio se ralentiza en Europa en el primer trimestre.
Las ciudades españolas confirman la tendencia de la ralentización de las rentas.
Por primera vez desde el fin de las restricciones a la movilidad en el tercer trimestre de 2021, el aumento intertrimestral del precio del alquiler en Europa está perdiendo fuerza. Así lo revela el Índice Internacional de Alquileres de HousingAnywhere correspondiente al primer trimestre del año, en el que se analizan más de 52.000 propiedades incluyendo apartamentos de un dormitorio, habitaciones privadas y estudios en 24 ciudades europeas.
En el primer trimestre del año los precios de los distintos tipos de inmuebles se mantuvieron sin cambios o registraron un ligero aumento. Los apartamentos registraron una subida del 1,9% respecto al cuarto trimestre del año pasado, los estudios del 4,9% y las habitaciones no experimentaron modificaciones.
El precio de los pisos de un dormitorio se ha mostrado sin cambios en Barcelona, Madrid y Valencia.
Las ciudades españolas confirman la tendencia de la ralentización de las rentas que se observa de manera generalizada en Europa en comparación al trimestre anterior. El precio de los apartamentos de un dormitorio se ha mostrado sin cambios en Barcelona, Madrid y Valencia, con cifras de 1.500 euros/mes, 1.300 euros/mes y 1.100 euros/mes, respectivamente.
Tampoco ha habido cambios respecto a los tres meses precedentes en Ámsterdam, donde los precios de los apartamentos alcanzan los 2.250 euros, los más caros de Europa, ni en Roma, con 1.700 euros. Por su parte, en Colonia los apartamentos se han encarecido un 0,3% en los últimos tres meses, mientras que en Berlín y Florencia el alza ha sido del 1%.
Más allá de la ralentización en el incremento de los precios, en siete ciudades el precio de las viviendas de un dormitorio se ha abaratado frente al cuarto trimestre del año pasado, según el estudio de HousingAnywhere. Así, en Turín el descenso se ha situado en el 12,4%, seguido de Bruselas (-8%), La Haya (-6,5%), Milán (-2,7%), París (-2,2), Munich (-1,4) y Viena (-0,8%).
Una fotografía trimestral distinta muestran tres ciudades europeas, al registrar ascensos de doble dígito en los últimos tres meses, según la plataforma de alojamientos. Se trata de Oporto (20%), Helsinki (12,5%) y Hamburgo (11,1%).
En el último año
Al mismo tiempo, el aumento interanual también está mostrando una ligera desaceleración, con un aumento medio del 11,9% en todos los tipos de vivienda, 2,4 puntos porcentuales por debajo del incremento interanual del último trimestre de 2022 (14,3%). A pesar de la tendencia, el índice revela que los precios son más elevado que los de hace un año, con un aumento del 16,7% en el alquiler de los estudios, el de las habitaciones un 10,9% y el de los apartamentos un 7,9%.
Ante el inicio de la temporada alta de turismo, «la oferta de viviendas de alquiler residencial corre el riesgo de reducirse aún más en este periodo, ya que es probable que varios propietarios pasen de mantener sus viviendas de alquileres a medio y largo plazo a alojamientos a corto plazo con fines turísticos. Con el nuevo curso académico que comienza en otoño y los estudiantes y jóvenes profesionales en busca de un lugar donde alojarse, un desequilibrio aún mayor entre la oferta y la demanda puede hacer que los precios sigan subiendo en los próximos meses», apunta el estudio de HousingAnywhere.
Por el momento, las rentas de los apartamentos se han abaratado en cuatro ciudades europeas en el último año. Es el cado de París (-12%), Roma (-2,9%), Turín (-2,6%) y Viena (-0,8%). Por su parte, Helsinki, Hamburgo, Bruselas y Madrid han mostrado las subidas de precio interanual más contenidas por debajo del 5%.
Respecto a los precios de hace un año, tres ciudades europeas registran alzas iguales o superiores al 20%. «A medida que se intensifica la escasez de vivienda en toda Europa, los gobiernos empiezan a proponer, debatir y tomar contrapartidas. Algunas de las medidas pretenden superar la falta estructural de oferta con incentivos, mientras que otras medidas, sin embargo, se basan en restricciones que corren el riesgo de convertirse en soluciones inmediatas a corto plazo con efectos adversos no deseados, en lugar de resolver las causas subyacentes a largo plazo», señala el estudio de la plataforma.
En Reykjavik, el precio de los apartamentos de un dormitorio ha subido en torno a un 34% respecto a marzo del año pasado, mientras que en Budapest se ha incrementado un 25,3% y en Munich un 20%. Por su parte, las alzas han sido del 18,4% en Ámsterdam y del 13,4% en Florencia.
Mónica G. Moreno/eleconomista.es