De Murcia al Caribe para levantar más de 22.000 viviendas.
Habrá una playa artificial y varias piscinas que formarán un malecón de más 3 km.
Larimar City & Resort. Así se llama el megaproyecto inmobiliario que aspira a convertirse en uno de los más grandes e innovadores de Latinoamérica. No es para menos. Se trata de una futura ciudad inteligente que albergará 22.000 viviendas, seis hoteles, centros comerciales, campo de golf, oficinas, universidad y hasta un hospital. Estará ubicada en Punta Cana (República Dominicana), en el acantilado Farallón de Verón situado a 100 metros de altura. Allí mismo también se construirá una playa artificial y varias piscinas que formarán un malecón de más de 3 kilómetros de longitud. Y al fondo, el mar Caribe.
«Es un nuevo concepto de ciudad resort donde los residentes y turistas podrán disfrutar de un entorno seguro y con todas las comodidades posibles. La edificación en torre del complejo posibilita que haya muchas zonas verdes donde se puede hacer deporte y tener un entorno más limpio», explica Juan Andrés Romero, consejero delegado de CLERHP, el grupo multinacional de origen murciano que está detrás del proyecto.
El proceso de construcción de Larimar City & Resort se ha diseñado en diez fases que generarán hasta 15.000 empleos directos en los próximos diez años. «Tenemos planificado diez años de venta y doce de construcción para que la ciudad esté totalmente terminada», explica Romero.
Despega en 2023
La primera fase de la smart city se pondrá en marcha en el segundo semestre de 2023 y contempla la construcción de los proyectos residenciales Prime Towers y Horizon View, que sumarán un total de 1.500 viviendas de lujo. También verán la luz dos hoteles, una sección del centro comercial y los 700 primeros metros del paseo marítimo -que estará totalmente operativo en 2028-.
«Vamos a trasladar allí el concepto de paseo marítimo del Mediterráneo. Será un espacio para caminar, disfrutar de la playa y también de los restaurantes y de toda la oferta de ocio disponible», dice el responsable de la compañía. La inversión de esta primera fase asciende a 200 millones de dólares.
En cuanto al perfil del comprador de vivienda, cada producto de Larimar City & Resort está orientado a un público diferente. Los apartamentos de Prime Tower están pensados para los inversores, es decir, para los clientes que buscan rentabilidad con un ratio coste/beneficio «muy atractivo». En cuanto a Horizon View, se trata de un producto más aspiracional dirigido al comprador que quiera tener su vivienda en propiedad en el Caribe. En cuanto al origen de los futuros propietarios, principalmente serán estadounidense y canadiense de edad avanzada, cerca de la jubilación.
Los impulsores del proyecto también esperan atraer compradores latinoamericanos con poder adquisitivo medio-alto que busquen seguridad en su inversión. Analizarán oportunidades inmobiliarias en la República Dominicana en lugar de hacerlo en otros países del norte en los que el precio de la vivienda es más elevado. «Otro pequeño nicho de mercado estaría formado por compradores del norte de Europa, aunque serán minoritarios debido a la competencia en cuanto a oferta residencial de sol y playa que hay en el Viejo Continente y su entorno»
Lorena Torío/eleconomista.es